viernes, 29 de febrero de 2008

La hora del socialismo - Por Ruben Giustiniani






El socialismo atraviesa el desarrollo político más importante de los últimos años. En las elecciones nacionales del pasado 28 de octubre, la fórmula integrada por el PS obtuvo 4.200.000 votos (23%) en todo el país, transformándose claramente en la principal fuerza alternativa a nivel nacional. Hemos obtenido un triunfo histórico con el cro. Hermes Binner en las elecciones para la gobernación de la provincia de Santa Fe. Seguiremos gobernando con Miguel Lifschitz en la ciudad de Rosario tras diecinueve años de una exitosa gestión socialista. Ganamos la intendencia de Zárate con el cro. Osvaldo Cáffaro, continuando con la tradición municipalista que caracterizó al socialismo a lo largo de la historia.
Obtuvimos varias bancas en la Cámara de Diputados de la Nación, lo que nos permitirá consolidar una significativa presencia en el Parlamento Nacional, consiguiendo asimismo concejalías, diputaciones y senadurías provinciales en Santa Fe, Provincia de Buenos Aires, Misiones, Catamarca, Córdoba, Ciudad de Buenos Aires, La Pampa, Mendoza y Chaco.
El Partido Socialista corona así con éxito y profunda coherencia político-ideológica el conjunto de decisiones partidarias adoptadas desde el Primer Congreso Nacional Ordinario del 25 de junio de 2005.
Nuestra organización está a la altura de este gran desafío histórico. Sabemos que esta realidad positiva nos alienta a seguir trabajando de cara al futuro, convencidos de que es muy importante lo que tenemos por delante.
Somos un partido que crece y que practica una política transparente y participativa, una política próxima a los ciudadanos y ciudadanas, sensible a sus problemas y aspiraciones. Un partido que ya ha dejado de ser una pequeña organización con vocación de mayorías, adquiriendo en el presente la mayoría de edad.
De esta forma, como lo hemos estado construyendo con nuestro trabajo desarrollado en distintos ámbitos, el PS, a través de una oposición responsable, constructiva y coherente seguirá planteando desde la independencia de su posición, la agenda pendiente de la calidad institucional y la distribución del ingreso en la República Argentina.
Y a la vez que continuaremos en el camino de construcción de ese gran Partido Socialista, seguiremos aportando a la construcción de un sólido frente progresista en la Argentina que integre a aquellas organizaciones políticas y sociales del espacio de centro-izquierda que expresan propuestas alternativas al proyecto hegemónico del oficialismo y alejadas de las alianzas de derecha.