martes, 11 de agosto de 2009
Editorial - Acción Socialista avanza
Luego de la pausa obligada a la que nos conminó el arduo trabajo electoral, volvemos con esta grata costumbre que hemos llamado Acción Socialista.
Hoy contamos dos años de nuestra publicación, que circula entre los vecinos de nuestra provincia, con nuestros relatos, nuestra historia, nuestras acciones políticas. De esta manera se manifiesta la constancia que se ha desarrollado, ininterrumpidamente, desde el primer número que se pensó allá en agosto del 2007.
José Ingenieros decía, hablando de la obra del líder peruano José Carlos Mariátegui, que cuando una publicación pasaba del cuarto número, recién ahí podía considerarse permanente. Como todos sabemos, no solamente en las publicaciones, sino en la realidad política, muchas iniciativas existen fugazmente. Pero cuando hay una persistencia en el tiempo, esto indica que más allá de nosotros, hay un pensamiento que se traslada en el tiempo, hay un concepto de organización política.
Así lo pensamos en el primer número y hoy lo queremos proyectar en mayor escala con más lectores, mayor información y mayor cobertura geográfica.
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En este número plasmamos la posición que tienen los socialistas ante la inminente sanción de una de las leyes más trascendentes que se han tratado en la última década: la nueva Ley de Educación Provincial. Seguramente, cuando estas páginas estén impresas y circulando, la Legislatura provincial habrá aprobado este instrumento legal, o estará pronto a hacerlo. Por eso no queríamos dejar pasar la ocasión de trasladarles la posición de nuestro partido en esta nueva norma.
Por supuesto en esta edición queremos dejar registro de la participación electoral del 28 de Junio. El FREPAM se ha consolidado como alternativa provincial y nuestro partido ha jugado un papel destacado en este proceso. Hemos estado a muy pocos votos de colocar a la primera socialista pampeana en el Congreso Nacional.
También abordamos la problemática que viven los vecinos de 25 de mayo, contada por nuestros compañeros y analizamos el futuro de nuestro partido en el nivel nacional.
Hoy contamos dos años de nuestra publicación, que circula entre los vecinos de nuestra provincia, con nuestros relatos, nuestra historia, nuestras acciones políticas. De esta manera se manifiesta la constancia que se ha desarrollado, ininterrumpidamente, desde el primer número que se pensó allá en agosto del 2007.
José Ingenieros decía, hablando de la obra del líder peruano José Carlos Mariátegui, que cuando una publicación pasaba del cuarto número, recién ahí podía considerarse permanente. Como todos sabemos, no solamente en las publicaciones, sino en la realidad política, muchas iniciativas existen fugazmente. Pero cuando hay una persistencia en el tiempo, esto indica que más allá de nosotros, hay un pensamiento que se traslada en el tiempo, hay un concepto de organización política.
Así lo pensamos en el primer número y hoy lo queremos proyectar en mayor escala con más lectores, mayor información y mayor cobertura geográfica.
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En este número plasmamos la posición que tienen los socialistas ante la inminente sanción de una de las leyes más trascendentes que se han tratado en la última década: la nueva Ley de Educación Provincial. Seguramente, cuando estas páginas estén impresas y circulando, la Legislatura provincial habrá aprobado este instrumento legal, o estará pronto a hacerlo. Por eso no queríamos dejar pasar la ocasión de trasladarles la posición de nuestro partido en esta nueva norma.
Por supuesto en esta edición queremos dejar registro de la participación electoral del 28 de Junio. El FREPAM se ha consolidado como alternativa provincial y nuestro partido ha jugado un papel destacado en este proceso. Hemos estado a muy pocos votos de colocar a la primera socialista pampeana en el Congreso Nacional.
También abordamos la problemática que viven los vecinos de 25 de mayo, contada por nuestros compañeros y analizamos el futuro de nuestro partido en el nivel nacional.
Luego del resultado electoral - Reconstruir un proyecto progresista en la Nación
Los resultados de la elección nacional del 28 de junio dejaron en claro el masivo rechazo al kirchnerismo en casi todo el país. Con él, también se derrumbó el “pseudo-progresismo”, ese que imperaba en los discursos pero que en los hechos nunca pudo traducirse en reformas impositivas progresivas, en políticas sociales universales, en el achicamiento de la brecha entre los que más ganan y los que menos, más allá de medidas gestuales que hemos apoyado.
La caída del kirchnerismo se parece en algo a lo ocurrido en el año 1997. En ese momento el menemismo llegaba a su fin pero, paralelamente, la Alianza preanunciaba un lógico recambio. Esta elección, más allá de triunfos locales, no proyecta un nuevo liderazgo nacional capaz de sustituir al gobierno en el turno electoral del 2011.
Este escenario debe congregar a los sectores progresistas a construir la fuerza política progresista necesaria para el país. De no hacerlo, la salida del kirchnerismo es por derecha, que hoy se expresa en dos similares variantes: el peronismo “disidente” con Reutemann y una un puñado de caciques locales y la derecha más clásica al estilo Macri y De Narváez.
La construcción de esa alternativa progresista debe consistir en poner ladrillos donde ya hay por lo menos cimientos: el Frente Progresista en Santa Fe, el Frepam en nuestra provincia, el Acuerdo Cívico y Social en varios distritos. Esta es la base sobre la que se debe edificar. Este espacio no se puede limitar sólo a los actuales actores (básicamente el PS, la UCR y el ARI) sino que debe extenderse a otras fuerzas políticas y sociales de perfiles ideológicos similares.
Naturalmente, el límite de esta construcción está en frenar los guiños a la derecha, una práctica habitual de Elisa Carrió, que ha enviado constantes señales a distintas corporaciones económicas, mediáticas y culturales de la derecha en los últimos tiempos. Afortunadamente los porteños no acompañaron masivamente esas propuestas y prefirieron votar a la alternativa que parecía más progresista antes que votar a la lista conformada por Carrió.
En esta edificación de una fuerza nacional de corte progresista no se debieran cometer los errores que en el pasado prohijaron un gran frente asentado sobre pies de barro. La base de esa construcción debe estar dada en los partidos políticos y su funcionamiento no debe estar sujeto exclusivamente a los devaneos de circunstanciales líderes hegemónicos que suelen arrastrar a sus fuerzas políticas hacia sus caprichos y arrojan al conjunto a su suerte personal. Se deben crear instancias orgánicas que ordenen su funcionamiento, que sistematicen su programática y que conduzcan la acción política.
El programa de esa fuerza debe expresar necesariamente un cambio de centroizquierda en el país. La enajenación discursiva por parte del kirchnerismo impidió que en el plano nacional florezcan fuerzas alternativas por izquierda al gobierno, fundamentalmente porque esa actitud estuvo acompañada por los conglomerados mediáticos que hoy los han abandonado, pero que en los primeros cinco años de gestión fueron fieles traductores de ese engaño colectivo. Debemos preservar las acciones positivas de este gobierno: la política de derechos humanos, la existencia de una Corte Suprema creíble y prestigiosa a los ojos de la sociedad. Tenemos que proponernos mejorar aquello bueno que compartimos, pero que el gobierno se encargó de hacerlo mal: estamos de acuerdo con el fin de las AFJP pero no creemos que los fondos de los jubilados sirvan para cualquier cosa; queremos que Aerolíneas sea argentina, pero para tener una línea de bandera que una al país no para salvar los negocios de los antiguos propietarios.
En esa construcción el socialismo tiene mucho para aportar. Un partido presente en la geografía nacional, con militantes y dirigentes comprometidos en una construcción genuina; la experiencia de gobierno y el ejemplo de que se puede transformar positivamente la realidad del pueblo y un programa de izquierda democrática para llevar adelante las reformas que el país se debe.
La caída del kirchnerismo se parece en algo a lo ocurrido en el año 1997. En ese momento el menemismo llegaba a su fin pero, paralelamente, la Alianza preanunciaba un lógico recambio. Esta elección, más allá de triunfos locales, no proyecta un nuevo liderazgo nacional capaz de sustituir al gobierno en el turno electoral del 2011.
Este escenario debe congregar a los sectores progresistas a construir la fuerza política progresista necesaria para el país. De no hacerlo, la salida del kirchnerismo es por derecha, que hoy se expresa en dos similares variantes: el peronismo “disidente” con Reutemann y una un puñado de caciques locales y la derecha más clásica al estilo Macri y De Narváez.
La construcción de esa alternativa progresista debe consistir en poner ladrillos donde ya hay por lo menos cimientos: el Frente Progresista en Santa Fe, el Frepam en nuestra provincia, el Acuerdo Cívico y Social en varios distritos. Esta es la base sobre la que se debe edificar. Este espacio no se puede limitar sólo a los actuales actores (básicamente el PS, la UCR y el ARI) sino que debe extenderse a otras fuerzas políticas y sociales de perfiles ideológicos similares.
Naturalmente, el límite de esta construcción está en frenar los guiños a la derecha, una práctica habitual de Elisa Carrió, que ha enviado constantes señales a distintas corporaciones económicas, mediáticas y culturales de la derecha en los últimos tiempos. Afortunadamente los porteños no acompañaron masivamente esas propuestas y prefirieron votar a la alternativa que parecía más progresista antes que votar a la lista conformada por Carrió.
En esta edificación de una fuerza nacional de corte progresista no se debieran cometer los errores que en el pasado prohijaron un gran frente asentado sobre pies de barro. La base de esa construcción debe estar dada en los partidos políticos y su funcionamiento no debe estar sujeto exclusivamente a los devaneos de circunstanciales líderes hegemónicos que suelen arrastrar a sus fuerzas políticas hacia sus caprichos y arrojan al conjunto a su suerte personal. Se deben crear instancias orgánicas que ordenen su funcionamiento, que sistematicen su programática y que conduzcan la acción política.
El programa de esa fuerza debe expresar necesariamente un cambio de centroizquierda en el país. La enajenación discursiva por parte del kirchnerismo impidió que en el plano nacional florezcan fuerzas alternativas por izquierda al gobierno, fundamentalmente porque esa actitud estuvo acompañada por los conglomerados mediáticos que hoy los han abandonado, pero que en los primeros cinco años de gestión fueron fieles traductores de ese engaño colectivo. Debemos preservar las acciones positivas de este gobierno: la política de derechos humanos, la existencia de una Corte Suprema creíble y prestigiosa a los ojos de la sociedad. Tenemos que proponernos mejorar aquello bueno que compartimos, pero que el gobierno se encargó de hacerlo mal: estamos de acuerdo con el fin de las AFJP pero no creemos que los fondos de los jubilados sirvan para cualquier cosa; queremos que Aerolíneas sea argentina, pero para tener una línea de bandera que una al país no para salvar los negocios de los antiguos propietarios.
En esa construcción el socialismo tiene mucho para aportar. Un partido presente en la geografía nacional, con militantes y dirigentes comprometidos en una construcción genuina; la experiencia de gobierno y el ejemplo de que se puede transformar positivamente la realidad del pueblo y un programa de izquierda democrática para llevar adelante las reformas que el país se debe.
Por una nueva ley de educación - Posición del Partido Socialista
En la actualidad está en tratamiento en la Legislatura de la provincia una nueva Ley de Educación. A través del diputado Adrián Peppino, hemos estado trabajando en la nueva norma y estas son algunas reflexiones y propuestas que intentamos trasladar al texto de la nueva ley.
La ley federal no fracaso. La ley federal dejo huella en el peor de los lugares, naturalizó que la escuela no sirve, naturalizó que los docentes no pueden, naturalizó que lo mismo da ir a la escuela que no, colonizó el y nos indujo a pensar que este era el único modo posible, y ese pensamiento gano el imaginario social. Lo que si fracaso fue el neoliberalismo…
Cuando hablamos de una reforma a la Ley Federal debemos tener en cuenta que un tercio de la población pampeana forma parte del sistema educativo, ya sea como estudiante, profesor o administrador. Por lo tanto, es difícil comprender lo que sucede en el interior de las instituciones si no se presta atención a lo que sucede en el ámbito de la sociedad.
Desde la vigencia de Ley federal hasta nuestros días, la escolarización se encuentra con una situación paradojal: mientras se va gestando una profunda exclusión social, se van registrando un crecimiento constante de la inclusión escolar. En otras palabras, mientras que la economía y el mercado de trabajo excluyen y desintegran, la escuela escolariza a proporciones cada vez más elevadas de niños y jóvenes.
El carácter masivo de la exclusión y la escolarización genera, entre otras cosas, una crisis del sentido tradicional de la escuela. Se pueden pasar muchos años en la escuela, se pueden alcanzar títulos y certificados sin haber desarrollado competencias tan elementales y estratégicas como el calculo de proporciones, la lectura comprensiva y la capacidad de expresión escrita, sin hablar de otros aprendizajes mas complejos y estratégicos.
La masificación de la escolaridad con exclusión social ha producido un terremoto en las instituciones de la educación básica. Estas parecieran haber perdido el rumbo. Para los “Nuevos Alumnos” que concurren a ella, la escuela no es necesariamente un lugar donde se aprenden cosas importantes para la vida. Los docentes viven su trabajo como una misión imposible.
Sin embargo, estamos dejando atrás una mirada sobre la educación impulsada por el neoliberalismo, este debe ser el punto de partida.
Comos socialistas creemos que la redacción de una nueva Ley de Educación debe incluir algunas proposiciones del nuevo enfoque como:
Educación para el logro de la inclusión plena sin inequidades sociales.
Educación integral para el desempeño social y laboral como para el acceso a estudios superiores.
Acceso y condiciones para la permanencia y el egreso de todos los habitantes.
Gratuidad de los servicios de gestión estatal.
Inclusión a través de políticas universales. Y asignación de recursos que otorguen prioridad a los sectores más desfavorecidos.
Compromiso con la libertad, la justicia, la igualdad y la solidaridad.
Espacios de participación para los docentes, las familias y los estudiantes.
Comprometer a los medios masivos a mayores grados de responsabilidad ética y social.
Implementación de programas de re-inserción de jóvenes que no hayan iniciado o hayan abandonado en algún nivel de escolaridad.
De esta manera se configura una nueva responsabilidad del Estado para la Educación provincial. Las dudas aparecen para poder entender que se debe pasar del papel a políticas públicas que aborden adecuadamente el conjunto de problemas del sistema educativo. Los principales son las desigualdades en el ingreso, la permanencia y el egreso del sistema educativo, pero también existen otros problemas como la sobrecarga de la crisis social.
Reformas propuestas
Educación Privada
Lamentablemente en el artículo 14 del proyecto de Ley se arrastrara alguna terminología de la Ley Federal, cuando hablábamos de lo público y de lo privado. Es una gran confusión conceptual que realizó la impronta neoliberal, no justamente para permitir que el Estado fuera a controlar a la enseñanza privada, sino con el objetivo de licuar lo público en lo privado.
También dimos el debate para derogar el artículo 94 del proyecto de Ley, que prevé otorgar vouchers a los pobres para que asistan a la escuela privada. Con este articulo se intenta dar legalidad al “tarro de la basura de la educación”, para que algunas instituciones reciban fondos por cada alumnos que llegue allí como consecuencia de la “Limpieza de la Escuela Publica”, y sin darnos cuenta se ha creado la primer escuela charter pampeana, como es el Liceo informatico de la ciudad de Santa Rosa.
Educación Sexual Integral
Esta vez no debe haber limites, ya se ha superado el dogma impuesto por algunas instituciones religiosas que dicen que abordar esta tematica en la educacion formal promueve la promiscuidad y evita llegar al matrimonio sin haber tenido relaciones sexuales. Pues curioso Dios el que invocan que estaría, por omision, facilitando la por ejemplo la propagacion del SIDA o que chicas de 14 años tengan 3 hijos en barrios de nuestra ciudad.
Consideramos por ello que el Estado tiene la obligación de garantizar un piso de formación y de educación sexual a niños, niñas y adolescentes para evitar dejarlos expuestos a mensajes controvertidos, malintencionados o despreocupados. Queremos destacar la importancia que la educación sexual tiene para terminar con el ciclo perverso de la reproducción de la pobreza generado por los embarazos adolescentes, la violencia doméstica y el abuso sexual.
Obligatoriedad
El proyecto de ley representa además un avance importante dado que plantea la obligatoriedad hasta la enseñanza secundaria. Es un avance importante que se vuelva a la obligatoriedad del primario y del secundario. Pero ¿Cómo se va a garantizar la obligatoriedad hasta el secundario?, es un debate. Pero es un debate todo el tema de los derechos sociales. Cuando uno plantea un derecho social está planteando la obligación de su cumplimiento.
Laicidad
En primer lugar, proponemos la incorporación del término “Laica” en la redacción de la Ley. Debemos agregar al contenido de la ley que “La educación pública es laica, prescindente en materia religiosa. Las instituciones educativas privadas podrán incorporar orientaciones religiosas de cultos admitidos en el Registro Nacional de Cultos pero los estudiantes que accedan a las mismas no serán obligados a profesarlas”.
Financiamiento
Es la medula del sistema. Hemos planteado que el 30% de los recursos del Estado sean destinados a educación. Un nuevo rol del Estado como el que se pretende, podrá hacerse efectivo si la educación no queda subordinada a las posibilidades recaudatorias. Debemos invertir el orden de prelación de las finalidades públicas. No podemos decir a esta sociedad que el derecho a la Educación sigue después del derecho a la obra pública y a la compra de acciones, como se establece en el Artículo 9 del proyecto.
La ley federal no fracaso. La ley federal dejo huella en el peor de los lugares, naturalizó que la escuela no sirve, naturalizó que los docentes no pueden, naturalizó que lo mismo da ir a la escuela que no, colonizó el y nos indujo a pensar que este era el único modo posible, y ese pensamiento gano el imaginario social. Lo que si fracaso fue el neoliberalismo…
Cuando hablamos de una reforma a la Ley Federal debemos tener en cuenta que un tercio de la población pampeana forma parte del sistema educativo, ya sea como estudiante, profesor o administrador. Por lo tanto, es difícil comprender lo que sucede en el interior de las instituciones si no se presta atención a lo que sucede en el ámbito de la sociedad.
Desde la vigencia de Ley federal hasta nuestros días, la escolarización se encuentra con una situación paradojal: mientras se va gestando una profunda exclusión social, se van registrando un crecimiento constante de la inclusión escolar. En otras palabras, mientras que la economía y el mercado de trabajo excluyen y desintegran, la escuela escolariza a proporciones cada vez más elevadas de niños y jóvenes.
El carácter masivo de la exclusión y la escolarización genera, entre otras cosas, una crisis del sentido tradicional de la escuela. Se pueden pasar muchos años en la escuela, se pueden alcanzar títulos y certificados sin haber desarrollado competencias tan elementales y estratégicas como el calculo de proporciones, la lectura comprensiva y la capacidad de expresión escrita, sin hablar de otros aprendizajes mas complejos y estratégicos.
La masificación de la escolaridad con exclusión social ha producido un terremoto en las instituciones de la educación básica. Estas parecieran haber perdido el rumbo. Para los “Nuevos Alumnos” que concurren a ella, la escuela no es necesariamente un lugar donde se aprenden cosas importantes para la vida. Los docentes viven su trabajo como una misión imposible.
Sin embargo, estamos dejando atrás una mirada sobre la educación impulsada por el neoliberalismo, este debe ser el punto de partida.
Comos socialistas creemos que la redacción de una nueva Ley de Educación debe incluir algunas proposiciones del nuevo enfoque como:
Educación para el logro de la inclusión plena sin inequidades sociales.
Educación integral para el desempeño social y laboral como para el acceso a estudios superiores.
Acceso y condiciones para la permanencia y el egreso de todos los habitantes.
Gratuidad de los servicios de gestión estatal.
Inclusión a través de políticas universales. Y asignación de recursos que otorguen prioridad a los sectores más desfavorecidos.
Compromiso con la libertad, la justicia, la igualdad y la solidaridad.
Espacios de participación para los docentes, las familias y los estudiantes.
Comprometer a los medios masivos a mayores grados de responsabilidad ética y social.
Implementación de programas de re-inserción de jóvenes que no hayan iniciado o hayan abandonado en algún nivel de escolaridad.
De esta manera se configura una nueva responsabilidad del Estado para la Educación provincial. Las dudas aparecen para poder entender que se debe pasar del papel a políticas públicas que aborden adecuadamente el conjunto de problemas del sistema educativo. Los principales son las desigualdades en el ingreso, la permanencia y el egreso del sistema educativo, pero también existen otros problemas como la sobrecarga de la crisis social.
Reformas propuestas
Educación Privada
Lamentablemente en el artículo 14 del proyecto de Ley se arrastrara alguna terminología de la Ley Federal, cuando hablábamos de lo público y de lo privado. Es una gran confusión conceptual que realizó la impronta neoliberal, no justamente para permitir que el Estado fuera a controlar a la enseñanza privada, sino con el objetivo de licuar lo público en lo privado.
También dimos el debate para derogar el artículo 94 del proyecto de Ley, que prevé otorgar vouchers a los pobres para que asistan a la escuela privada. Con este articulo se intenta dar legalidad al “tarro de la basura de la educación”, para que algunas instituciones reciban fondos por cada alumnos que llegue allí como consecuencia de la “Limpieza de la Escuela Publica”, y sin darnos cuenta se ha creado la primer escuela charter pampeana, como es el Liceo informatico de la ciudad de Santa Rosa.
Educación Sexual Integral
Esta vez no debe haber limites, ya se ha superado el dogma impuesto por algunas instituciones religiosas que dicen que abordar esta tematica en la educacion formal promueve la promiscuidad y evita llegar al matrimonio sin haber tenido relaciones sexuales. Pues curioso Dios el que invocan que estaría, por omision, facilitando la por ejemplo la propagacion del SIDA o que chicas de 14 años tengan 3 hijos en barrios de nuestra ciudad.
Consideramos por ello que el Estado tiene la obligación de garantizar un piso de formación y de educación sexual a niños, niñas y adolescentes para evitar dejarlos expuestos a mensajes controvertidos, malintencionados o despreocupados. Queremos destacar la importancia que la educación sexual tiene para terminar con el ciclo perverso de la reproducción de la pobreza generado por los embarazos adolescentes, la violencia doméstica y el abuso sexual.
Obligatoriedad
El proyecto de ley representa además un avance importante dado que plantea la obligatoriedad hasta la enseñanza secundaria. Es un avance importante que se vuelva a la obligatoriedad del primario y del secundario. Pero ¿Cómo se va a garantizar la obligatoriedad hasta el secundario?, es un debate. Pero es un debate todo el tema de los derechos sociales. Cuando uno plantea un derecho social está planteando la obligación de su cumplimiento.
Laicidad
En primer lugar, proponemos la incorporación del término “Laica” en la redacción de la Ley. Debemos agregar al contenido de la ley que “La educación pública es laica, prescindente en materia religiosa. Las instituciones educativas privadas podrán incorporar orientaciones religiosas de cultos admitidos en el Registro Nacional de Cultos pero los estudiantes que accedan a las mismas no serán obligados a profesarlas”.
Financiamiento
Es la medula del sistema. Hemos planteado que el 30% de los recursos del Estado sean destinados a educación. Un nuevo rol del Estado como el que se pretende, podrá hacerse efectivo si la educación no queda subordinada a las posibilidades recaudatorias. Debemos invertir el orden de prelación de las finalidades públicas. No podemos decir a esta sociedad que el derecho a la Educación sigue después del derecho a la obra pública y a la compra de acciones, como se establece en el Artículo 9 del proyecto.
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